La fotografía creativa, más allá de la realidad
En el post anterior hablabamos sobre: La fotografía surrealista, una ventana a los sueños, es maravilloso e inspirador ver como algunos artistas logran plasmar imágenes tan oníricas que parecen sacadas de una película de ciencia ficción, su lenguaje surrealista se acerca más a los sueños que a la vida real.
Cuando se creó la fotografía en 1824, su fin era retratar la “realidad” tal cual la vemos, sin ninguna posibilidad de aspirar a la categoría de obra de arte ya que se consideraba que era la cámara la que hacía todo el trabajo, hoy en día sabemos que eso no es así, ya que en palabras del fotógrafo Peter Henry Emerson “el artista, usando la fotografía como medio, escoge su tema, selecciona los detalles, generaliza el conjunto y así presenta su visión de la naturaleza. Esto no es copiar ni imitar la naturaleza, sino interpretarla, que es todo lo que puede hacer un artista, y el nivel de perfección depende de su técnica y de sus conocimientos sobre esta técnica; y el cuadro que resulta, sea cual fuere el método de expresión, será bello en proporción a la belleza del original y a la habilidad del artista.” No podría estar más de acuerdo con esta afirmación, ya que el fotógrafo es un artista en sí mismo.
Pero en este post quiero resaltar especialmente a aquellos artistas que no se limitaron a crear una obra de arte tomando como base la realidad, sino a aquellos que la llevaron un paso más allá. Es la que he denominado con un término general Fotografía creativa, ya que reúne diferentes técnicas que vienen desde mucho tiempo atrás pero que cada día da unos pasos agigantados en la utilización de las mismas.
La denominada fotografía pictorialista buscaba hacer las fotografías similares a un dibujo o grabado. Para muchos de los fotógrafos de esta corriente artística el trabajo posterior a la toma era la etapa más importante del proceso creativo, considerando el negativo como un óleo y el trabajo que realizaban en el positivo como la auténtica actividad creadora. Algunos de sus padres fueron : Gertrude Käsebier y sus fotografías de mujeres, Julia Margaret Cameron y sus famosos ángeles, Edward Steichen y sus retratos impactantes, Robert Demachy y sus fotografías que parecen auténticas pinturas, Aleksandr Ródchenko y Henry Peach Robinson con sus fotomontajes, Max Ernst y Raoul Hausmann con sus collages surrealistas, y Man Ray con sus fotogramas.
Hoy en día la fotografía digital y el manejo de programas de edición como Photoshop, han permitido a diferentes artistas actuales crear auténticas obras de arte digitales, me gustaría destacar a Joel Robison, un joven artista canadiense que une su pasión por la lectura y la fotografía en unos autorretratos surrealistas maravillosos, juega principalmente con la noción de tamaños al mejor estilo de Alicia en el país de las maravillas: teteras enormes, mariposas atrapadas en frascos gigantes y los más inspiradores paisajes; también está la artista sueca Sonja Hesslow que aprovecha todas las herramientas digitales para crear fotografías que mezclan realidad y naturaleza con una sensibilidad envidiable; el fotógrafo italiano Francesco Romoli, que juega con la fotografía, el diseño gráfico, el collage y el bricolaje, creando unas imágenes con una estética steampunk; y mi favorito Christophe Kiciak, un genio para combinar arte y tecnología en unas dementes imágenes.
El collage es una herramienta muy útil para crear fotografías increíbles, como el fotógrafo y artista digital Thomas Dood que crea collages digitales que van desde la fotografía surrealista al arte clásico. La ventaja de esta técnica tan antigua es que los montajes no tienen que ser necesariamente digitales, algunos ejemplos de collages manuales son: Ben Giles y su obsesión con las flores, Bryan Olson y su estética retrofuturiusta, Caroline Alkire y sus mundos espaciales, Lynn Skordal y su mezcla de fotografías antiguas con elementos actuales, Sammy Slabbinck y su estilo retro, Alex Gross y sus vibrantes colores, y mi favorita sin duda es Eugenia Loli y sus metáforas visuales increíbles.
El collage no es la única forma de crear imágenes asombrosas sin necesidad de un montaje digital, también está la opción de crear esos mundos imaginarios en el mundo real y capturarlos en una fotografía (recordemos las fotografías surrealistas anteriormente mencionadas), como la fotógrafa y artista plástica estadounidense Sandy Skoglund, cuyas fotografías oscilan entre el surrealismo y el arte conceptual; Lotta van Droom que apoyada en el vestuario y el maquillaje logra crear unos retratos realmente impactantes; y mi favorita Jee Young Lee, que en su pequeño estudio y sin más ayuda que su imaginación y talento artístico crea mundos en tamaño real que parecen una linda y cuidada maqueta.
Sin duda son muchas las posibilidades y técnicas para expresarse creativamente por medio de la fotografía, solo se necesita una idea que nazca desde el corazón y la pasión suficiente para comenzar a experimentarlas.
Me encantaría profundizar más en este tema, así que si las imágenes y diferentes técnicas que vimos te recordaron a alguien o algo que has visto anteriormente, sería genial que lo compartas con nosotros.
(Los álbumes de todos los artistas anteriormente mencionados se encuentran al final de la pestaña Galería de Imágenes increíbles)
